MARZO 24, 7 a.m. HOY COMETI EL ERROR DE LEER MUY TEMPRANO UNA SECCION CULTURAL IMPRESA

(Las sillas del olvido, svp, 2009). Ciudad de Guatemala. No deja de causarme honda preocupación el que buena parte de la producción, gestión, presentación y divulgación de la actividad artística y cultural (en sentido "restringido" del término), carece casi por completo de "actos críticos" que establezcan el umbral entre -por citar algunos ejemplos- sinceridad discursiva y desplante retórico, dominio formal y formulismo manierista, concepción propia y originalismo vacuo, impulsos referenciales y referencialidad apasionada, signo artístico y ruido de confusiones... Es urgente fundar un espacio múltiple y/o transmediático (virtual, impreso, radial, televisivo, etc.) de crítica abierta, debate, interrogación productiva... De otro modo perderemos lo que nos queda de sentido común, (no digamos de "buen sentido", el cual está prácticamente extinto), seguiremos aplaudiendo a Arjona, y los jóvenes artistas-posibles volverán, una y otra vez sin avanzar, sobre las etapas de nuestro patético activismo de pacas... (Salvando las excepciones, claro). Hoy cometí un error. Y aunque el balance dista mucho de ser positivo, hay cosas alentadoras que se fijaron en mis retinas: las inquietantes contradicciones de Bromo, que por un lado (re) visita con aparente fecundidad poética a ALICIA y por otro reivindica un bodrio seudo-cristiano denominado Popol Vuh o algo así (a riesgo de repetir, a su modo, lo que quizás experimentó Asturias para escribir ese paroxismo extraordinario de la usurpación creadora del mundo del "otro" que es HOMBRES DE MAIZ); el anuncio de una nueva "crítica cultural global" (previsible pero muy sensata) de Cazali a los premios Oscar, etcétera...